domingo, 15 de junio de 2008

El Wicho...

Hoy es domingo, ya estoy en Maracay pasando mis días de descanso. Mi hermana menor se va para Valencia ya que vive y trabaja allá. Me dice "Pupú dame la cola al terminal". Tomo mi G9 y le digo vámonos, te llevo y luego me voy a ver las fotos del profe Wilson Prada que están en una exposición.

Unas de las imágenes se encuentran en la fachada de la contraloría del estado Aragua y las otras en el museo de Arte contemporáneo Mario Abreu, ubicado en la Ganadera, avenida Constitución. Las primeras: "los últimos testigos", son retratos de personajes del barrio el Carmen, un popular sector ubicado en el centro de Maracay muy cercano a la contraloría; las segundas: "Miradas y Testimonios", antología de Wilson Prada, es una exposición integrada por 64 fotografías.

En esta muestra fotográfica, se puede apreciar los distintos temas que despiertan el interés de Wilson: la ciudad, que comprende la memoria de la Maracay de ayer y hoy; su gente, esquinas y edificaciones; la iconografía del “Che Guevara”; personajes del barrio el Carmen, la naturaleza, el mar, el Parque “Henrry Pittier”, La proyección de sombras, el desnudo femenino y por último un cuerpo de trabajo de índole religiosa a manera de instalación.

Wilson Prada es en parte el responsable de lo que soy hoy día profesionalmemente hablando, este gran fotografo fue el que me impulsó hacia la fotografía periodística y de noticias, aunque yo quería dedicarme a ser documentalista. Recuerdo claramente que un día me dijo "¿Y ahora qué vas a hacer? ya terminaste los cursos... yo le dije Wicho yo quiero vivir de la fotografía...él me dijo, anda al “Periodiquito” y busca empleo allí.

El Periodiquito es el diario más pequeño y popular del estado Aragua y quedaba a tres casas de la escuela donde estudié fotografía. Durante unos meses intenté e insistí, pero no me aceptaban para el empleo ya que no tenía experiencia laboral. Al año me aceptaron “porque ya estaba fastidioso”y fue a partir de ese momento, específicamente en el año 2000, cuando comienza mi carrera como fotoperiodista; la cual está muy influenciada por Wilson Prada. El Wicho como cariñosamente le decimos.

Los invito a ver su trabajo en la ciudad de Maracay.






2 comentarios:

Gennaro dijo...

Estar agradecido de quienes nos han motivado de alguna manera o influenciaron nuestras vidas para transitar este camino de la fotografía es verdaderamente significativo. Pocos lo hacen y además reconocer los propios origenes, es un acto de humildad y profesionalismo. Te felicito por ello.

He tenido la oportunidad de ver parte de tu anecdotario fotográfico y es estimulante, pues te transporta a la escena sin que nunca hayas estado allí. Eso tiene un valor importante.

Sólo me resta decirte pana, que de vez en cuando daré una ojeada a tu blog para tener otra perspectiva y refrescar un poco la visión cotidiana que tenemos de las cosas.

carola315 dijo...

Hola Gil
¿como estas?
suerte el encontrarte, leyendo tu post me recuerdas también a El negro hermitaño como le decía yo y a Rodolfo Fido Dido vecinos nuestros allá en Maracay aprendiendo también de la fotografía, y por supuesto de tus constantes progresos desde el periodiquito.
Por supuesto que me alegra haber llegado hasta acá, me parece que en cada toma estuve de nuevo en Venezuela, sobretodo en tu casa de Maracay, ese lugar en la calle 5 me trae muy buenos recuerdos.

Saludos desde México DF.
Carolina.
pd.
saludos a tu mamá, y tus hermanas.